@BarbaraCabrera
“Quienes
alcanzan el poder con demagogia terminan haciéndole pagar al país un precio muy
caro”
Adolfo
Suárez
PEÑISMO
ABSTRACTO: Movimiento político gestado desde Atlacomulco, Estado de México; encabezado
–actualmente- por Enrique Peña Nieto (EPN) aunque cuenta la leyenda que sus
hilos (por aquello de ser un títere) los mueve el innombrable y su incómodo tío
Arturo Montiel. Sus orígenes se remontan a la época de PRIcámbrico tardío cuya
corriente es solapada por sus cuates, aplaudidores y bots; cuyas bases las encontramos en la mercadotecnia de los medios
tradicionales y oficialistas de comunicación, encabezada por Televisa.
Un movimiento
donde los cuates son los elegidos para conformar un gabinete, para junto a su
cabecilla EPN aplicar una agenda lejana a las demandas ciudadanas y cercana a
los intereses propios, internacionales y de manutención del poder; a ellos solo
se les pide lealtad absoluta y llevar el mensaje a todos los rincones de
México y el mundo.
Un movimiento
sostenido por el ruido de sus aplaudidores, a los que no parece importarles sus
carencias; no reciben “hueso”, si acaso les llega alguna que otra chichigua [expresión
colombiana que refiere el poco valor de algo, insignificante] para
mantenerlos contentos; ocasionalmente son tomados en cuenta, sobre todo para
ser promotores de su “amado líder” y el voto efectivo a “su partido”; vitorean con
especial convicción las hazañas de EPN.
Un movimiento
cacareado por los bots –regularmente
a sueldo- que inundan las redes sociales –en especial Twitter- con tres
objetivos bien diferenciados: a) desinflar trending
topic que osen ir en contra de la corriente denominada Peñismo abstracto;
b) atacar a los detractores; y, c) posicionar temas coyunturales a pedido, para
de esta manera mantener activo el movimiento.
Una corriente
que tiene un lema secreto: “No quiero que me den, sino que me pongan donde hay”
[conocido a voces, pero a ellos les gusta ignorar],
traducido por los aplaudidores en expresiones como: “No importa que robe, pero
que salpique”. Todo ello, sin olvidar que para la vieja guardia, como para el
Peñismo abstracto “la moral continúa siendo un árbol que da moras”
La finalidad de
este movimiento, ya se habrá percatado lector y el ciudadano informado, es conservar
su poder para extender sus tropelías e imponer sus reformas. La meta inmediata:
“Mover a México”. [Solo que no se sabe a ciencia cierta hacia
dónde, aunque por sus imposiciones y omisiones, nos podemos dar una clara idea
del rumbo]
Dicho
movimiento encuentra aliados ocasionales: PAN y PRD [un ejemplo
contemporáneo lo encontramos en el Pacto por México http://pactopormexico.org/],
así como en cómplices de palestra conocidos como partidos satélite [recuérdese
la alianza electoral “Compromiso por México” que agrupó al PRI y al Partido
Verde Ecologista de México (PVEM) que condujo a Enrique Peña Nieto a ser
inquilino de Los Pinos, a partir del 1° de diciembre de 2012; así como
múltiples alianzas electorales y gubernamentales que mantienen al PRI en el
poder y gravitando en la escena pública al PVEM]
No obstante, de
que el Peñismo abstracto inició con una masiva campaña propagandística, la cual
continúa, goza de escasa legitimidad y se ha desdibujado de tal manera que cualquier
acierto, lleva consigo varios tropiezos: el escándalo de La
Casa Blanca que no se olvida; las
desapariciones forzadas –destaca el caso Ayotzinapa-; la adquisición del avión
presidencial; la reciente asistencia de EPN a Colombia para atestiguar la firma
de la paz de aquél país, cuando en el suyo se vive de la ¡pas, bam, pum!
Por ello, en
las grandes cúpulas dinosaúricas, se advierte de su presencia incómoda. Baste
ver la debacle que sufrió en las recientes elecciones el 5 de junio, donde el
PRI redujo su número de gubernaturas de 19 a 15, entre la que destaca Veracruz,
considerado como la joya de la corona electoral; derivado de ello, el
presidente nacional del PRI alistó maletas y dijo “me voy, pero no del todo”.
Actualmente,
Los Pinos es la sede del Peñismo abstracto, los ciudadanos padecemos sus
estragos. Hagamos lo posible para que finalice este escenario, el país ya está
muy lastimado [#MéxicoLindoyHerido].
Lo he dicho y
reitero ¡es tiempo de actuar! con acciones por mínimas que parezcan, lo lograremos.
La máxima es #NoRendirse http://bit.ly/1AZ0s0w.
México y sus ciudadanos, son más grandes que los partidos, gobernantes,
representantes, políticos, instituciones e hipertrofia legislativa que lo
mantienen cooptado. Lo dejo a la reflexión.
Es todo por
hoy.
¡Nos leemos
la próxima Nornilandia!