@BarbaraCabrera
“Carpe diem” (Aprovecha el momento)
Horacio
Presento a ustedes este día una Nornilandia reflexiva.
En la vida, de manera constante, enfrentamos un sin fin de situaciones: unas de extrema felicidad y otras tantas de tristeza exacerbada ¿Por qué ocurre ello? La respuesta más acertada es, porque se trata de condición humana; debido a que tenemos sentimientos, filias, fobias; modos de ser y pensar distintos a quien nos rodea. Lo importante, es vivir. Y esas 5 sencillas letras engloban un aprendizaje constante.
Entonces ¿alguna vez podremos ser felices completamente? ¿Es conveniente vivir en un solo estado de ánimo? ¿Cómo seres humanos como lograr un equilibro? ¿Vale la pena luchar por ello? ¿Y que ocurre si no estamos interesados en un justo medio?
Las respuestas a los anteriores planteamientos, serán diversas. Habrá quien diga que se trata de una falacia, en virtud de vivir muy feliz cada instante. Otro sector referirá que la felicidad no tiene punto intermedio. Existe quien afirma que ésta simple y sencillamente, no existe.
Alguna vez alguien refirió y secundo la moción: la felicidad constante nos conduciría a la locura. De ahí la importancia de conquistar un justo medio, llamado así por Aristóteles quien es autor de las siguientes máximas: “El hombre que se mantiene en el justo medio lleva el nombre de sobrio y moderado” y “la virtud está en el término medio”.
Por otra parte encontramos el Aurea mediocritas, aludida así en la filosofía de Horacio, misma que “plantea la intención de conseguir un deseado punto medio entre los extremos o un estado ideal en el que no afecten en exceso ni las alegrías ni las penas. Esta relacionado con el hedonismo epicureísta basado en conformarse con lo que se tiene y no dejarse llevar por las emociones desproporcionadas”
¿Hacia dónde dirigirnos? ¿Es bueno conformarnos con lo que tenemos? ¿Sirve o no en esta época demostrar penas y alegrías? ¿Será acaso mejor dudar de todo, ser escépticos? ¿Es importante tener creencias y si es así, en que o quiénes? ¿Si no logramos el justo medio, entonces no somos virtuosos?. Deliberemos juntos. Generemos pensamiento crítico porque sólo ello nos hará grandes.
En mi opinión, es primordial equilibrar nuestros sentimientos y comportamientos; por ende, ello se traduciría en una vida placentera. Estoy de acuerdo que vivir en el bienestar o goce perpetuo nos lleva a no aspirar a obtener más en diversos ámbitos de nuestra vida: sea personal, profesional, amorosa, familiar, económica, cultural, educativa y lo que se sume.
La invitación, es racionalizar la conveniencia de tomar o no las oportunidades que de frente se nos presenten; un primer paso, es detectar cuando esto ocurra, créanme que hay quien no lo sabe. Así que atentos, abran bien los ojos, oídos receptivos, mente abierta y la mejor actitud: esos son los ingredientes. Luego no digan que no se los advertí.
Es todo por hoy.
¡Nos leemos la próxima Nornilandia!