@BarbaraCabrera
“Me enseñaron que el
camino del progreso no es rápido ni fácil”
Marie Curie
Antes
de iniciar esta columna, doy mi opinión
de lo que acontece en Michoacán (una de las entidades más heridas de este
cada vez más #MéxicoLindoyHerido). Recordar que el 11 de diciembre de 2006 –a
10 días de ocupar Los Pinos-, Felipe Calderón anunció el Operativo Conjunto
Michoacán; después de 7 años, es decir el 13 de enero de 2014, se firma un nuevo
Acuerdo para el Apoyo Federal a la Seguridad de Michoacán.
Hoy
uno y otro bando de políticos se desgarran las vestiduras, se avientan culpas y
señalan que lo que cada cual hace e hizo es lo mejor. No es así, los resultados
ahí están, hablan por sí mismos. Pasamos de los “daños colaterales” al
“restablecimiento de la situación”.
¿De qué sirve firmar acuerdo tras acuerdo? ¿Creen
que somos tan ingenuos para creer que tras sus discursos y sus fallidas
“estrategias” rescatarán un Michoacán que descuidaron por tanto tiempo? ¿Ante
que tipo de burla gubernamental nos encontramos? ¡Ya
basta de tanta manipulación y de combatir con fuerza bruta lo que ustedes
mismos han provocado! Mi solidaridad a los
hermanos michoacanos #FuerzaMichoacán.
Dicho
lo anterior, va el texto de este miércoles de #ColumnaNornilandia:
La semana pasada en Nornilandia abordé 10 estrategias de manipulación mediática
que son utilizadas (en este caso por el Gobierno) para mantener el status quo y de esta manera continuar
ejerciendo un sometimiento que se percibe en el estancamiento en diferentes
horizontes, donde el progreso simplemente no es considerado.
Ha
llegado el momento de hablar de un ingrediente esencial de ese antídoto para comenzar
a revertir de manera paulatina los efectos de esas tácticas que se han
utilizado desde tiempos inmemoriales, para manipular a la ciudadanía y como lo
decía en aquella ocasión, conservar el control
y por ende el poder.
Así
que mis lectores, vayamos a dilucidar ese antídoto que es preciso se encuentre
al alcance de todos.
¿De qué se trata? De
la lectura
¿Cuál el ingrediente activo?:
lecturas para construir un mejor país, un mundo más llevadero.
¿Qué se necesita?
Libros o documentos donde estén
plasmadas ideas, información; pero sobre todo la disposición de querer hacerlo.
Ya que la lectura –al igual que la escritura- debe constituirse en el más
soberano de los actos.
¿Es posible para todos?
Sí, y les dejo un ejemplo muy sencillo: si tienen un libro que consideren
ayudaría a provocar opinión, mente crítica y tomarlo, libérenlo regalándolo a
quien sea y pidan que pase de mano en mano. Que no constituya un pretexto no
tener dinero para adquirir un libro. Ya sé, existen libros que amamos tanto que
no será posible desprenderse de ellos ¿y si invertimos en uno igual y lo
obsequiamos? Les sorprendería ver como leer cambia esquemas y genera cambios.
¿Para que nos sirve leer? Nos
mantiene informados, estimula la curiosidad por preguntar y conocer más.
Tratándose
de las estrategias de manipulación mediática: leer es bueno para no
distraernos; para no permitir que otros solucionen nuestros problemas; para no
aceptar con resignación medidas gubernamentales que no son benéficas; para no
permitir se apliquen decisiones que impliquen retroceso; para no consentir ser
tratados de manera infantil; para no ser seducidos por argumentos de telenovela
y caras bonitas en propagandas políticas; para romper las ataduras de la
ignorancia y la mediocridad; para estimular la proactividad ciudadana y la
mente crítica; para desterrar la autoculpabilidad de creer que somos causantes
de todos nuestros males y para conocernos más de lo que nos conocen los
políticos y actuar en consecuencia.
¿Es redituable? Absolutamente,
es imperativo apostar a la lectura como antídoto contra la violencia. Es
ineludible que la lectura detenga las balas. Hagamos de la lectura un ejercicio
para ser los ciudadanos que merece el progreso.
Los
convoco a hacer uso y a difundir masivamente este antídoto y así librarnos de
ser cautivados por cuanta estrategia de manipulación mediática que pulula en el
ambiente.
Si
conocen algún otro, les pido lo compartan y juntos hagamos uno que resulte
infalible.
Hace
algunos tweets les revelé que el
secreto para extinguir a los dinosaurios y salir de la era del PRIcámbrico
tardío es leer, leer, leer y formar una mente crítica y proactiva.
Recuerden,
este país, este mundo puede cambiar pero no lo hará como producto de generación
espontánea; requiere de nuestra ayuda y trabajo constante.
Así
que, sigamos construyendo un mejor país, para dejar un mundo más llevadero. Y a
propagar se ha dicho este antídoto, porque como lo dijera El Quijote “cambiar
al mundo, amigo Sancho, que no es locura ni utopía sino justicia”
Es
todo por hoy.
¡Hasta
la próxima Nornilandia!