15 ago 2011

“FAVOR DE NO POLITIQUEAR”


@BarbaraCabrera

“Puedes engañar a todo el mundo algún tiempo. Puedes engañar a algunos todo el tiempo. Pero no puedes engañar a todo el mundo todo el tiempo”

Abraham Lincoln


¡Es inevitable hablar de política!, y esto debido a la dinámica en la que estamos inmersos; al ver un día sí y otro también a los “suspirantes” a un cargo de elección popular en México lindo y herido; incluidas aquellas “fuerzas poderosas” que se asumen como los proveedores del capital político.

Por lo que estar atentos a lo que ocurra en el trayecto rumbo a los comicios de 2012, -sin olvidar las elecciones en el Estado de Michoacán a celebrarse el 13 de noviembre de este año, donde se elegirá Gobernador, 40 diputados y se renovarán los 113 Ayuntamientos- es un deber ciudadano. Ya lo sostenía Aristóteles en La Política en su libro 1: el hombre es un zoon politikón; con ello el estagirita aludía a la cuestión social y política. Afirmaba que solo el hombre es político. Toda vez que su naturaleza conlleva la vida en comunidad. Por tanto, la dimensión social ayuda a constituir la base de la educación y la dimensión política contribuye a la extensión de esa educación.

En este sentido hacer política es una condición ciudadana y no solo referida a aquellos tiempos, sino a los actuales. Desterremos la idea de que sólo a los políticos les compete conocer de estos menesteres; ¡no está permitido asumirse como analfabetas políticos! y mucho menos en la época en que el país requiere ciudadanos comprometidos que entiendan de este rubro para actuar y proponer en consecuencia; además del concierto de naciones en consonancia a un mundo globalizado; donde dejar hacer, dejar pasar no nos ha dejado nada bueno.

En palabras de Bertold Brecht “el peor analfabeto, es el analfabeto político: no escucha, no habla, no participa... No sabe que el costo de la vida (...) depende de las decisiones políticas. Es un burro que se enorgullece e infla el pecho diciendo que odia la política. No sabe el IMBÉCIL que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado, el asaltante y el peor de todos los bandidos que es el político sinvergüenza, deshonesto corrupto, y lacayo (…)”

Eso sí, que quede bien claro; en esta Nornilandia se hace un llamado a la política no a politiquear definido por la Real Academia Española a través de tres acepciones, a saber: 1. intr. Intervenir o brujulear en política; 2. intr. Tratar de política con superficialidad o ligereza; y, 3. intr. Am. Hacer política de intrigas y bajezas.

En esta tesitura, tal como lo han solicitado mis lectores; a través de la Columna Nornilandia, de manera paulatina haré varias entregas de la vida y obra de los candidatos más visibles rumbo a 2012; a través de lo cual contribuiré al conocimiento de la política actual para la toma de decisiones. Además de escudriñar en la actuación de los partidos políticos, entidades de interés público a través de las cuales los candidatos pueden o no llegar al poder, a través de elecciones libres y periódicas; ante lo cual tendremos como ciudadanos la decisión de optar por el México lindo y herido que anhelamos.

¡Hagamos política! y cuando estemos a punto de caer en la tentación de politiquear conjuguemos en voz alta este verbo en imperativo negativo: no politiquees; no politiquee; no politiqueemos; no politiqueéis y no politiqueen.


Por hoy es todo.




¡Nos leemos la próxima Nornilandia!