@BarbaraCabrera
Invitado a la columna @_Leonard0
“No puedo vivir en una isla de prosperidad, cuando estoy rodeado de un mar de miseria”
Ayrton Senna
Aparentemente hablar de política y Formula 1 no tendría razón de ser, ni una lógica aparente. No obstante, si nos ponemos a estudiar cada uno de estos temas, encontramos que existen factores en común: la pasión que se le imprime para ejercer cada cual y las reglas que tiene cada una de ellas.
Ya en 2011 y con la carrera presidencial en marcha, debido a que existen “suspirantes” declarados y alguno que otro todavía de “clóset”, pero que ya les vimos las verdaderas intenciones. Es de fundamental trascendencia comenzar a tratar cuestiones relacionadas con lo que, en un futuro no muy lejano ocurrirá; es decir las elecciones 2012 y para hacerlo más atractivo se dialoga en esta columna sobre dicha situación, relacionándolo con un tema apasionante: la Fórmula 1
Para tal efecto, nos hemos puesto de acuerdo dos especialistas, uno en política y otro de F1. Y aportando cada uno desde su trinchera, hemos elaborado para ustedes lectores, un experimento que consideramos interesante, esto es; utilizar mi Nornilandia para dar a conocer la redacción de una columna conjunta que desde el título es harto interesante.
A continuación, parte del diálogo que sostuvimos:
Bárbara: Conocí vía twitter a un apasionado de la Fórmula 1. Comenzamos a conversar de temáticas varias, entre ellas de aficiones y gustos; unos muy disímbolos y otras agradables coincidencias. Lo que es un hecho es que cada cual es un apasionado de lo que hace y anhela. De repente surgió la idea que hoy les presentamos como columna.
Leonardo: Es una fortuna conocer a la maestra Bárbara, una persona muy inteligente, admirable y trabajadora como no muchas. Incluso amable, ya que me reconoce como especialista de la F1, sin serlo claro está.
Bárbara: Aunque Leonardo me comentó que no suele practicar el hábito de la escritura, le pareció un buen reto llevar a cabo esta labor. Así que conjuntamos experiencias de cada uno. Eso sí, ambos a estudiar el tema que maneja el otro. Por lo que he intentado analizar la F1. Encontré que es tan apasionante como la política. Es como unir dos mundos contrarios en un engranaje cuasi perfecto. En ambos hay reglas, estrategias, peligros, así como satisfacciones. La cuestión es saber como se aplican de un lado y de otro.
Leonardo: Claro que existen similitudes, (aunque particularmente prefiero ver autos corriendo que políticos “hablando”) hay reglas que no siempre se cumplen, hay apariencias suntuosas, el protagonista es uno solo, pero tiene un enorme equipo detrás, del que depende mucho su éxito o fracaso, también hay equipos que son muy fuertes y otros que no tanto, pero la constante principal, es que para ellos estar en el gran circo es lo más importante.
También considero que la mayor diferencia es que mientras para un político, la carrera electoral es solo el principio, para un piloto de F1 digno, competir lo es todo….Y cabe bien citar otra vez al mejor piloto de la historia (según mi apreciación) Ayrton Senna cuando afirmaba que “Todos los años hay un campeón, pero no siempre hay un gran campeón” sutil, pero importantísima diferencia cuando aplica en un dirigente popular.
PD: Me aprovecho del amable gesto de la maestra Bárbara para pedir atención especial a un par de pilotos mexicanos que están compitiendo este año en la categoría de automovilismo más grande del mundo: Sergio “Checo” Pérez y Esteban Gutiérrez del Equipo Sauber Motorsport, el primero como piloto en competencia y el segundo en pruebas.
Bárbara: Yo prefiero la política, claro está. Es de mencionar que este sector, al igual que la Fórmula 1, también cuenta con un imprescindible equipo de trabajo; estas personas son aquellos héroes anónimos que contribuyen para que el aspirante a algún cargo de elección popular llegue a la meta o persista en el intento. ¡Ya estamos en el camino rumbo a ese 2012!, y como en la F1 se han encendido los motores; habrá sin duda varias curvas peligrosas, caminos inesperados, otros más recorridos y otros conocidos; veremos hacia donde nos lleva la pista que parece se sigue edificando tratándose de cuestiones políticas; lo cual será crucial para el destino de México lindo y herido.
Por lo pronto, esta Columna he llegado al banderazo que nos indica la meta. Ahora les corresponde a ustedes, mis lectores, opinar sobre esta el resultado obtenido en estas letras. ¿Les agradó?
Sus comentarios son muy valiosos.
¡Nos leemos la próxima Nornilandia!