@BarbaraCabrera
“Yo
creo que llegará un tiempo en que sobre las ruinas de la corrupción se
levantará la esplendorosa mañana del mundo emancipado, libre de todas las
maldades, de todos los monstruosos anacronismos de nuestra época y de nuestras
caducas instituciones”
Samuel
Fielden
Abro los
periódicos apenas inicia el día para mantenerme informada. No consulto uno
solo, procuro tener una visión lo más completa posible. Las notas son diversas,
últimamente las relativas a la inseguridad aquí y allá van en lamentable
incremento. Todos somos testigos.
Pero hay
otras que indignan, que deben llevar a actuar; a tomar las riendas, a levantarse
del cómodo sillón de status quo.
Veo una y
otra vez a políticos que aprovechando el erario promueven su imagen. Se creen
dueños del presupuesto, dan a manos llenas, se toman fotos con personas a las
que les entregan migajas, sin proporcionarles herramientas para ser mejores
ciudadanos, para estar mejor formados e informados. Por el contrario, desde las
instituciones -cooptadas por políticos lejanos a la realidad, unos más
corruptos que otros, los más impunes y algunos cómplices- se genera esa
necesidad. Recuérdese estamos en tiempos de hambruna electoral http://bit.ly/2sK9Op3 donde la pelea por el
hueso, se recrudece.
Esos
políticos que viven de la imagen, a quienes los niveles de aceptación ciudadana
nada parecen importarles, y es así debido a que igual llegan y se enquistan en
el poder. Situación que tú, él, ella, nosotros, ustedes, ellos, ellas; todos…
podemos cambiar.
México parece
vivir en un sempiterno eclipse, y con ello no me refiero al fenómeno
meteorológico cuya duración promedio fue de 2 minutos y del cual el mundo entero
estuvo atento el pasado lunes 21 de agosto de 2017, sino a los acontecimientos
que este país padece por la dejadez de unos (ciudadanos) y el saqueo, cinismo,
corrupción, impunidad y complicidad de otros (políticos sátrapas voraces)
En este orden
de ideas, para sacar a México de ese eclipse en el cual se encuentra desde hace
buen tiempo, es ineludible hacer más. Actuar. No dejar, ni esperar que unos
cuantos decidan por nosotros. Desterrar de una vez y para siempre el “no se puede”,
“todos son iguales”, “para que voto si siempre ganan los mismos”, “ellos son
los poderosos”, etcétera, etcétera.
Lo he dicho y
no me cansaré de reiterarlo: si todos salimos a votar en libertad meteremos en
aprietos a los políticos y al Sistema, que esperan y trabajan para obtener una
baja participación y así poder controlar fácilmente a unos pocos.
Respecto a
los que ya se colaron y ejercen el poder, quitémosle ese afán de #todolopuedo y
#hagoloquequiero. Usemos los mecanismos legales y tecnológicos a nuestro
alcance para dar seguimiento a su actuar, a las decisiones de gobierno; pero
ojo, utilicemos esos instrumentos de forma auténtica. Existen ejemplos de que
están siendo secuestrados por grupos de interés político, por deporte para
joder a otros y para complicar lo de por sí enmarañado y es así porque siguen siendo
los menos los que se asoman y hacen algo.
¡No más
eclipses políticos! ¡No más políticos milagro, ni telegénicos que a fuerza de
la mercadotecnia y de una millonaria inversión para construir su imagen, llegan
al poder! ¡No más curuleros!
Posdata:
solo espero que la concurrencia y entusiasmo que generó el eclipse se replique
en la participación ciudadana para rescatar lo que nos queda de país.
Por hoy es
todo.
¡Hasta la
próxima Nornilandia!