Después de escuchar estos últimos días a Felipe
Calderón en su extendida gira del adiós; he llegado a la conclusión de que
somos unos malagradecidos; ya que dice el personaje aludido, estos seis años
fueron maravillosos y desafiantes, salimos adelante. Se destaca que su gobierno
fue humanista y se tuvo un trato igualitario para los ricos y pobres, apoyando
en todo momento a la educación.
En este sentido, lo que vemos mal, lo que no
funciona; ha sido producto de nuestra imaginación.
Así que borremos de nuestras mentes y memoria aquello
que sale de toda lógica, de este contexto conocido como los años maravillosos
vividos durante el sexenio que está por fenecer; aquí unos ejemplos:
1. El registro de más de 83 mil muertos y un
número importante de desaparecidos, como consecuencia de una estrategia
fallida, derivada en lo que los estadistas engloban como daños colaterales.
2. De acuerdo con datos de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT) y de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo
(ENOE) del INEGI; entre 2007 y 2011 se sumaron alrededor de 596 mil que ni
estudian, ni trabajan. ¡Ya suman 5.1 millones… y contando!
3. El crecimiento exponencial de organizaciones
delincuenciales existentes y la creación de nuevos carteles; ante la torpeza de
una Secretaria de Seguridad Pública cooptada por Genaro García Luna y secuaces.
4. El aumento de la pobreza, tal como lo reporta
el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social;
organismo público descentralizado de la Administración Pública Federal.
5. Una política educativa rezagada y manipulada
por Elba Esther Gordillo, ante la complacencia del gobierno, con quien la líder
del SNTE ha establecido una evidente alianza político-electoral.
6. La impunidad con la que opero la alta
burocracia, con tintes de insensibilidad ante casos de flagrante violación de
derechos humanos y constitucionales. Los ejemplos son varios, el más
representativo: el de la guardería ABC.
…Y mejor hasta aquí dejamos el listado, que
seguramente será enriquecido por mis lectores.
Entretanto, estamos a tres días de comenzar un
nuevo sexenio con un San Lázaro (sede de la Cámara de Diputados) cercado; con
cinco estaciones del Sistema Colectivo de Transporte Metro cerradas por
petición del Estado Mayor Presidencial; con una apresurada toma de protesta,
cuya logística es protestas y te vas. Con una entrega de banda presidencial sin
palabras donde Calderón y Peña Nieto saldrán del inmueble sin emitir mensaje
alguno ante los legisladores; con un Instituto Federal Electoral dispuesto a
defender la toma de protesta de quien fue validado por dicha institución; y,
con un nuevo andamiaje de la Administración Pública Federal, donde se situará
una desempolvada clase política.
Por hoy es todo.
Sigamos el intercambio de ideas en Twitter,
mientras nos leemos en la próxima Nornilandia. Me encuentran como
@BarbaraCabrera