@BarbaraCabrera
“¡Oh legislador! No me
des leyes para los pueblos, sino pueblos para las leyes”
Pitágoras de Samos
El
9 de agosto de 2012 comenzó a consumarse lo que vivimos recientemente en la
Cámara de Diputados, al ser ese el día en que se publica en el Diario Oficial
de la Federación la reforma constitucional en materia política, que incorporó
-entre otras figuras- la iniciativa preferente del Ejecutivo federal, la cual
se prevé en el artículo 71, párrafo final de la Constitución política de los
Estados unidos mexicanos.
En
esta tesitura, antes de irse, Felipe de Jesús Calderón Hinojosa nos obsequia a
los ciudadanos un par de reformas: una, (discutida primero en el Senado) es
para reformar la Ley General de Contabilidad Gubernamental; la segunda
(analizada y aprobada en la Cámara de Diputados) es la laboral; iniciativas
consideradas como urgentes en el trámite y para la cual los legisladores tienen
un plazo de 30 días.
La
laboral, contiene tópicos candentes como Outsourcing,
contratación de prueba, pago por hora, aviso de rescisión, pensiones
alimenticias, licencia de paternidad, vacantes y transparencia sindical. Ejes
sobre los cuales parece existe una prisa inusitada por legislar, evitando los
debates a profundidad y espinosos; nos dicen a los ciudadanos que la izquierda
no quiere debatir y por eso toma la tribuna; que el resto de los diputados son cuasi heroicos al dar trámite en tiempo
y forma. Los medios de comunicación tradicionales nos recetan una y otra vez
sus bondades, quieren hacer pensar que los opositores a esta reforma integral
están secuestrando al Congreso. Lo que ignoran es que los ciudadanos
interesados los vemos como big brother
–aquel concepto orwelliano conocido como el gran hermano- través del Canal del
Congreso y nos percatamos de la premura, del mayoriteo y de las sin razones
para no incluir modificaciones que tal vez puedan beneficiar a quienes
habitamos este país.
Luego,
después de varias reuniones de comisión, donde el Diputado Martí Batres se
estrella con una puerta de vidrio rompiéndola para no llegar tarde a la
reunión, y donde otro diputado sale en silla de ruedas, argumentando se siente
mal; viene la sesión de pleno en la Cámara de Diputados, justo el 28 de
septiembre, que se suspende ante el punto de quiebra en el debate
parlamentario; los legisladores nos dan un espectáculo jamás antes visto, al
reanudar la sesión desde un palco; ante ello, el mensaje fue claro: la reforma
pasa porque pasa; y así fue, la madrugada del 29 del mismo mes los Diputados
“cumplieron”, ahora va a la colegisladora; al Senado de la República, donde se
vislumbra se apruebe sin tanto show.
Mientras tanto, algunos ciudadanos solo esperan, otros se manifiestan en la
plaza pública y seguirán haciéndolo, ahora en el Senado; varios más hacen Trending topics
#MétanseSuReformaPorElCurul.
Es
cierto, la laboral –al igual que un listado amplio de temas- requieren ser
analizados y actualizados a la realidad imperante, vivimos un tiempo que ha
avanzado más que sus leyes e instituciones. Un país que no termina de transitar
entre un pasado que lo tiene anclado y un futuro que se ve borroso. Solo por
ejemplificar, manifiesta la Secretaría de Gobernación que heredará al gobierno
entrante 112 conflictos, por lo menos esa es la información pública que se
conoce ¿Cuántos más habrá? Sin duda, más de los que podemos imaginar y se
entrevé que seguiremos inmersos en un mar de demagogia, corrupción e impunidad
desmedida sino hacemos algo.
Al
respecto de la reforma laboral, reflexionemos y busquemos respuestas ¿cuál es
la prisa? ¿Por qué eludir un amplio debate? ¿Hasta cuando serán escuchadas y
tomadas en cuenta las minorías parlamentarias? ¿En verdad creen que con este
tipo de medidas -iniciativa preferente- se evita la parálisis legislativa? En
lo sucesivo, ¿Es conveniente cronometrar las reformas?
No
perdamos de vista que en el Legislativo es donde los ciudadanos estamos
representados en formato reducido, así que nuestras expectativas y exigencias
deben estar encausadas ahí, no nos quedemos solo mirando desde un palco
esperando que las cosas pasen, nada es resultado de generación espontánea,
nuestra realidad no será distinta sino asumimos nuestra responsabilidad ciudadana
y exigimos en consecuencia.
Por
hoy es todo.
Continuemos
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