24 oct 2011

“¿Y LOS GASTOS APÁ?”

@BarbaraCabrera

“Los gastos vuelan al encuentro de los ingresos”
Ley de Murphy


Como mexicanos estamos obligados a contribuir a los gastos de la nación; por lo menos eso es nos dice el texto constitucional. Podemos o no estar de acuerdo con esta situación y se presta en algunos casos a suspicacia –ciertos personajes dirían a sospechosismo–. Baste recordar la escasa rendición de cuentas de la clase gobernante; la información pública gubernamental proporcionada a cuenta gotas y una transparencia que raya en el cinismo.

Justamente tratándose de este rubro –el de los dineros que aspira percibir y gastar en 2012 México lindo y herido– les diré que corresponde al Poder Ejecutivo, a través de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público presentar el proyecto de Presupuesto para el próximo año fiscal. Si la memoria colectiva no es corta, se tendrá presente que antes de irse a trabajar por sus aspiraciones presidenciales Ernesto Cordero entregó el 8 de septiembre de 2011 el paquete presupuestal para ser analizado por los Diputados Federales.

¿Y en qué consiste dicho paquete presupuestal? ¿Por qué es tan importante para el país? Ya que es entregado, ¿en quién recae la responsabilidad de analizarlo y aprobarlo? Pues bien, el paquete incluye los criterios generales de política pública, la iniciativa de decreto de la Ley De Ingresos, la iniciativa de decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación, la iniciativa de decreto que modifica y deroga algunas disposiciones del Código Fiscal y la iniciativa de Decreto que modifica la Ley General de Derechos.

Y en esta Nornilandia les diré que de todo ese paquete, la Cámara de Diputados ha cumplido con el plazo legal al aprobar la Ley de Ingresos para el ejercicio fiscal 2012 el 20 de octubre de 2011; en una sesión de 90 minutos nuestros representantes han decidido los rubros en que el Estado mexicano tendrá dinero.

¿Y por cumplir los plazos legales los ciudadanos tenemos que darles un premio a nuestros legisladores? ¡Por supuesto que no!, toda vez que se trata de una de las obligaciones contraídas por ésta Cámara integrante del Congreso de la Unión. Ahora tocará el turno al Senado de la República, quien tiene hasta el 31 de octubre para continuar con el proceso legislativo necesario para que México lindo y herido posea, dentro del orden jurídico nacional con este documento rector de la economía.

¿Cuáles son los aspectos que llaman más la atención del multicitado ordenamiento?, veamos:

La Ley de Ingresos para 2012, se aprobó con 59 mil millones de pesos adicionales a la propuesta del Ejecutivo Federal, para sumar recursos por tres billones 706.9 mil millones de pesos.

Se aprobó que las entidades federativas continúen recibiendo hasta el 31 de diciembre de 2014 partidas federales por la venta final de la gasolina, con lo que se estarían avalando los llamados “gasolinazos”.

El Producto Interno Bruto a la baja, del 3.5 al 3.3%; aumento al déficit de 0.2 a 0.4% y un ajuste al tipo de cambio, de 12.20 a 12.80 pesos por dólar.

Se mantiene el precio del petróleo en 84 dólares con 90 centavos y se instruye a Pemex incrementar de 2 millones 550 mil a 2 millones 560 mil barriles diarios la producción de petróleo y a la SHCP más eficiencia en la recaudación para obtener 3 mil 630 millones de pesos, sólo por ese concepto.

Es importante resaltar que la aprobación de la Ley de Ingresos es responsabilidad de ambas Cámaras, en tanto que la del Presupuesto de Egresos de la Federación es facultad exclusiva de la Cámara de Diputados.

Pronto vendrá el turno del jaloneo del Presupuesto; que en teoría es la herramienta principal del gobierno federal para la ejecución de la política pública. Es decir, ya se proyectó que se recibirá; ahora ¿cómo se va a distribuir? Estemos con los ojos bien abiertos no vaya a ser que en un dos por tres lo aprueben y ni por enterados nos demos.


Por hoy, es todo.

¡Nos leemos la próxima Nornilandia!