@BarbaraCabrera
“Siempre hay alguien que besa y otro que se limita a permitir el beso”
George Bernard Shaw
El beso constituye un acto de amor, llevarlo a cabo nos hace felices. No obstante hay besos que marcan y otros que matan; por lo menos puede ser así en cuestiones políticas.
En esta tesitura, materia de esta Nornilandia será el beso de judas -se suele llamar así al beso dado por una persona a otra a la que ha traicionado o tiene intenciones de hacerlo- que la profesora Elba Esther Gordillo Morales va prodigando a ciertos actores de la clase política que de alguna manera han dicho: ¡sí aquí estoy listo para la contienda electoral de 2012!
Y la leyenda de los besuqueos entre este singular personaje con quienes ahora ocupan un espacio en la palestra pública podrían ser plasmados de manera infinita, baste recordar que su poder data desde 1989 y no ha parado. ¡Son ya 22 años de dar, repartir, concertar, manipular, exigir a quienes le entregan su dignidad, prestigio y tal vez futuro, a cambio de situarse en un espacio de decisión pública; con ello, es evidente que no sólo me refiero a contiendas electorales, sino a puestos claves en el gobierno!
Veamos los casos más recientes:
El 13 de julio de 2011, La Gordillo sugirió que Santiago Creel Miranda acudió a ella meses atrás para pedirle ayuda; entretanto Creel niega rotundamente tan encuentro, donde se cree se abordó el tema de apoyos electorales. ¿Cuál versión será real? desde mi punto de vista, ambas se prestan a suspicacias. Es un hecho: las aspiraciones presidenciales de Santiago Creel parece han sido selladas con la crónica de un beso espurio.
El 24 de julio de 2011, en una entrevista para un suplemento del periódico español El País, Elba Esther Gordillo Morales, dijo entre otras cosas lo siguiente y cito textual: “Que si digo que este país necesita ahora un gran pacto y que el candidato que más me gusta es Marcelo Ebrard, tal vez pueda estar perjudicando al señor” Estas palabras ha desatado diversidad de interpretaciones; a la par que Marcelo Luis Ebrad Casaubón, actual jefe de gobierno del Distrito Federal y aspirante presidencial, descarta una alianza con quien de manera evidente le coquetea para dejar su huella en ese beso fatídico. ¡Estemos atentos cual será el desenlace de esta historia!
Y me pregunto, ¿Será que como no ha podido negociar con el partido en el gobierno Elba Esther ahora comienza la etapa de cortejo con otros actores? ¿Es acaso un elemento distractor encaminado a restar fuerza a quienes son aspirantes? De antemano sabemos que la profesora Gordillo Morales está en la banca de los acusados; de aquellos que por su expediente deben ser expulsados de manera automática, pero nadie se atreve a dar la orden. ¿Estarán dispuestos estos personajes de la política a dejarse “seducir” por los “encantos del poder” de la Gordillo ?
No cabe duda, la lidereza vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación es una mujer plagada de corruptelas y las muestras ahí están: Lotería Nacional, ISSSTE, gubernaturas, Diputaciones y Senadurías y hasta la mismísima Presidencia de la República.
No obstante, como se ha comenzado a destapar la caja de Pandora, ninguno de los ungidos desea experimentar los efectos del beso de judas de Gordillo Morales, o por lo menos no en público. ¿Habrá algún político temerario dispuesto a recibir un ósculo de Elba Esther? ¿Será que esta historia osada de encuentros para apoyos electorales cese por el bien de México lindo y herido?
¡Lo dejo a la reflexión!
Por hoy, es todo.
¡Nos leemos la próxima Nornilandia!