@BarbaraCabrera
“Volvamos a esos días felices en
los que había héroes”
Bette Davis
Inmersos en la
vorágine de las campañas electorales, de manera habitual recibimos información
a raudales -y no me refiero a las propuestas que suelen dosificarse a cuenta
gotas tomando como punto de partida la multiplicidad de asuntos públicos por
resolver- en esta ocasión hago alusión a las apariciones de los cuatro
candidatos presidenciales; que un día sí y otro también, dan materia de
análisis a quienes desempeñamos el ejercicio columnístico.
En este sentido,
decidí tener un diálogo informal con mis alumnos de maestría, para conocer sus
percepciones en estos tiempos electorales; ello me permitió actualizar mi
hipótesis, acerca del desencanto que se vive respecto a la clase política, así
como del desapego de los asuntos públicos ¿A que se debe? ¿Falta de
información? ¿Hartazgo hacia la clase política? ¿Este alejamiento es propio de
un sector o permea en toda la sociedad? ¿Es válido decir todas las anteriores?
¡Y las que faltan por enunciar!
En esta tesitura
y como es viernes -para algunos de relax- me atrevo a presentar a través de
esta columna, un formato combinado entre los superhéroes y los candidatos. En
suma, como sería México lindo y herido, si además de los 4 candidatos
tuviéramos a esos personajes de historieta reconocidos y conocidos como los 4
fantásticos insertos en esta sociedad.
Reed
Richards,
es un hombre multimillonario, líder del grupo y un científico talentoso,
multimillonario. ¿Cuál es su superpoder? desarrolla una elasticidad
extraordinaria que le permite estirar y deformar su cuerpo a voluntad. Él es:
el hombre elástico. Por su parte, Andrés Manuel López Obrador posee cualidades
elásticas, derivadas de su andar por la Presidencia Nacional del Partido de la
Revolución Democrática; candidato del PRD al Gobierno del Estado de Tabasco; fue
Jefe de Gobierno del Distrito Federal; así como -por segunda ocasión
consecutiva- candidato a la Presidencia de la República. ¿Será que esa
elasticidad siga siendo suya después del 1 de julio? ¡Ya lo veremos! El tiempo
nos dará respuestas.
Susan Storm es la segunda al mando del
equipo. Puede volverse invisible y crear campos de fuerza igualmente
invisibles, ese es precisamente su superpoder. En efecto, ella es la mujer
invisible. Es hermana de Johnny Storm
y novia de Reed Richards. A su lado,
encontramos a Josefina Eugenia Vázquez Mota, que se apodera de esta cualidad
-que para sí es más bien un defecto- para muestra baste recordar su incipiente
paso por la SEP donde la normalista Elba Esther le hizo tal sombra que terminó
por desdibujarla; otro ejemplo fue su escasa participación en las votaciones de
la Cámara de Diputados, donde desaparecía llegada esta etapa del proceso
legislativo. Actualmente, sigue en las mismas, hasta tuvo que dar un giro a su
estrategia de campaña para darse a notar. ¿Acaso le habrá funcionado? ¿tundra pore
se solo hecho su campo protector?
Johnny
Storm, cuyo poder reside en controlar el fuego, este
personaje proyecta bolas de fuego desde su cuerpo y vuela para convertirse en
la antorcha humana, tal cual se le conoce en el mundo del cómic. ¿A poco no
Enrique Peña Nieto es un hombre que vive entre llamas? Y lo digo así por las
quemadas que se ha dado, dentro de las que encontramos: su manifiesta ignorancia
al no saber citar 3 libros, la utilización del telepronter para rendir una
simple protesta; y, más recientemente, el acarreo tuitero para levantar su rating en esa red de comunicación. Eso
solo por mencionar su paso por la campaña presidencial, ya que tiene su “flameada”
historia como Gobernador del Estado de México. ¿Podrá EPN controlar ese fuego
como la hace la entrañable antorcha humana? Si es así ¿a que precio?
Finalmente,
tenemos a Ben Grimm, viejo amigo de Reed, se convierte La Mole, este héroe
no es para nada normal, en virtud de que su piel es de color anaranjado y su
textura se asemeja al barro seco que adquiere aspecto de piedra. ¿En dónde
están sus superpoderes? En su fuerza y resistencia. Su apariencia monstruosa
es, para él, una maldición. Equivalente a este singular personaje; y a su lado,
tenemos a Gabriel Quadri de la Torre, quien conforme avanza la campaña, se va
conociendo su cara dura; un hombre que se autonombra ciudadano pero que ha
fungido como funcionario público; aunado a que el apoyo que tiene de la
Gordillo lo hace arrastrar con una maldición la cual no sabemos hacia donde
derive. ¿Podrá tener la fuerza y resistencia para aguantar las ordenes de Doña
Elba? ¿Qué será de él después del 1 de julio? No dejemos de seguir esta
historia.
Es pertinente
decir que los superhéroes -esto es, los 4 fantásticos- no son de clóset; ya que
sus identidades no son secretas; lo que es más, son considerados como
celebridades debido a sus aportes heroicos y científicos hacia la sociedad. Mientras
que, el otro grupo de 4 -léase los presidenciables- muchos querrían después de
la elección ni siquiera recordar.
¿De los cuatro
no fantásticos, -a saber: Josefina, Enrique, Gabriel y Andrés Manuel- hay que agregar
algo más? Seguramente así es; no obstante, no lo veo oportuno por respeto a los
superhéroes admirados por muchos; por tanto, prosigamos.
Idealizar no
cuesta nada y nos traslada a un mundo de posibilidades. Empero, es pertinente
situarnos en la realidad; de ninguna manera y bajo ninguna circunstancia
tenemos superhéroes en este país, contamos con 4 que distan de ser fantásticos,
de entre los cuales, surgirá quien tomara las riendas de este país -para bien o
para mal- ¿Y tú que me lees ya sabes que rumbo le quieres dar a México?
Es todo por hoy.
¡Tenemos un
encuentro la próxima Nornilandia!