@_BarbaraCabrera
“Mi personalidad y la de los míos han
sido villanamente calumniadas por la prensa banal y corrompida de
Emiliano Zapata
“Tal cual una plaza pública en
Twitter transitamos, conversamos, observamos; nos organizamos, debatimos,
disentimos. Y lo hacemos a través de los tweets.”
Bárbara Cabrera
A propósito de
que el 20 de noviembre de 2021 conmemoramos 111 años de la Tercera
Transformación de México, conocida como la Revolución Mexicana haré alusión a
uno de sus protagonistas, Emiliano Zapata Salazar, lo cual enlazaré con la
época actual de benditas redes sociales, así como de Cuarta Transformación de
la Vida Pública liderada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Di inicio a esta
Nornilandia con dos frases que representan el contenido de esta columna. Por
una parte, lo referente al sentir de Emiliano Zapata acerca de los medios
tradicionales y la manera en que distorsionan los hechos (cualquier parecido
con los medios tradicionales que actualmente propagan Fake News a la menor provocación para apoyar a la decadente y
minoritaria oposición moralmente derrotada, no es coincidencia; de ahí la
trascendencia de conocer la historia, para no estar condenados a repetirla); y
la segunda frase, relativa a lo que representa Twitter, una de las principales
benditas redes sociales.
Comienzo por
dilucidar ¿quién fue Emiliano Zapata y porque es considerado un personaje
crucial en la historia de México? para efecto de esta columna haré mención de
aquello que sintetiza su importancia en la vida pública de este país.
Conocido como El Caudillo del Sur, fue uno de
los símbolos más
importantes de la resistencia campesina
en México que estuvo al mando del Ejército
Libertador del Sur. Sus principales ideales giraron alrededor de la justicia social, libertad,
igualdad, democracia social; así como el respeto a las comunidades indígenas,
campesinas y obreras.
Cuando tenía
únicamente nueve años, Zapata quedó impactado al presenciar un despojo de campesinos por parte
de grandes hacendados de la
zona, por lo que cuestiona a su padre quien le dice no se puede hacer nada,
Emiliano responde: “¿No se puede? Pues
cuando sea grande, haré que se las devuelvan”.
Con tan sólo 23
años, Emiliano Zapata ya había liderado un levantamiento en la ciudad de
Yautepec para plantar cara a los desmanes que allí cometía el cacique Pablo
Escandón. A los 30 años, se convierte en dirigente agrario de Morelos, donde
analizó documentos que acreditaban los derechos de propiedad de los pueblos
sobre sus tierras, los cuales habían sido negados por las Leyes de Reforma.
Al proclamarse
el Plan de San Luis, que
marca el inicio de
Zapata, que
tenía una mentalidad mucho más abierta que otros revolucionarios mexicanos,
formuló su propia Reforma Agraria, conocida como el Plan Ayala por haberse
promulgado en la población de Ayala, en el estado de Morelos. La reforma
buscaba colectivizar las grandes tierras y liberar así a miles de campesinos e indígenas
de la opresión latifundista a la que estaban sometidos. Zapata quería ser
consecuente con otro de sus célebres y reivindicativos lemas: “La tierra para
quien la trabaja”.
Zapata era un
hombre de profundas convicciones, también abogó por el derecho a la huelga y
por la emancipación de la mujer.
No obstante, el 10 de abril de 1919 Emiliano
Zapata fue engañado por Jesús
Guajardo, quien le hace creer su descontento con
Venustiano Carranza, por lo que quería unirse a él; para ello le ofrece
armamento y municiones para continuar con su lucha. Así, en la Hacienda de Chinameca, Morelos, al
cruzar el dintel, tiradores escondidos en las azoteas, abrieron fuego contra
Zapata y su escolta de cien hombres. Una vez asesinado, Emiliano Zapata se
convirtió en el apóstol de
la revolución y símbolo de los campesinos desposeídos.
Vamos ahora con
la época actual, donde las redes sociales resultan ser los servicios
protagonistas que circundan el ciberespacio. Se estarán preguntando ¿Por qué Twitter y no otra red social en referencia al
instrumento que hubiese utilizado Emiliano Zapata?
Debido
a que es una plaza pública que no pertenece a una élite, lo que la vuelve
democrática.
Twitter, es el espacio idóneo donde la expresión me lo
dijo un pajarito adquiere un significado propio en la era digital; y si lo
convertimos en una herramienta para propagar ideas, conocimiento y propuestas,
esta Red la llevamos a otro nivel. Aunado a que su ecosistema es propicio para
ello, en el entendido que algunos de sus rasgos característicos lo hacen único
y atractivo para hacerlo nuestro para los fines aludidos; ya que es asimétrico,
breve, descentralizado, global, hipertextual, asincrónico, intuitivo,
multiplataforma, sincrónico, social y sobre todo, viral.
En este sentido,
Twitter se constituye en una atractiva herramienta tecnológica para la generación y provocación de cambios socio-políticos; por
ende, en la época que le tocó vivir a Zapata hubiera sido un interesante aliado
para ganar adeptos y organizar de manera pronta y eficaz la restitución de
tierras a aquellos que fueron vilmente despojados.
Veamos a continuación algunos ejemplos acerca de como El Caudillo del Sur hubiese utilizado los tweets,
los retweets y los favoritos; por supuesto en todo momento acompañado del poder
del hashtag que viralizado llegaría a Trending Topic.
Desde mi
perspectiva si Emiliano Zapata –ese gran ícono que revolucionó la vida pública
del México de aquellos ayeres- hubiese tenido Twitter, sin dudarlo lo hubiese
usado como una poderosa herramienta tecnológica para pugnar por los derechos de
los desposeídos, a partir de la consecución de grandes reformas legales a
través de sus aliados.
Hoy, tenemos
esta poderosísima red social y de comunicación que bien encauzada ha
contribuido y continúa siendo un componente importante para desterrar los
vestigios del anquilosado régimen neoliberal.
Las expectativas
son altas. El cambio de régimen en México, está en marcha. Contribuyamos desde
nuestras trincheras a consolidar la Cuarta Transformación para que juntos
continuemos haciendo historia.
Es todo por hoy.
¡Hasta la
próxima Nornilandia!