@BarbaraCabrera
“(Las
Redes Sociales) permiten la creación en red, más allá de una suma de
individualidades” Manuel Castells
Esta
Nornilandia, es una reflexión que surge de la observación analítica y participante
en las Redes Sociales online –en lo
sucesivo, RS- (en este caso me referiré a dos de ellas: #Twitter y Facebook por
ser las mejor situadas dentro del mapa de las RS), parto del supuesto que cada
cual suministra a sus usuarios una manera distinta de mostrarse al mundo, donde
nativos e inmigrantes digitales cohabitamos.
Twitter
es una red de comunicación, que por su instantaneidad y brevedad en los
mensajes –llamados tweets- constituyen un fiel reflejo de la plaza pública, los
tuiteros sabemos que lo acontecido en la #Twittósfera para nada se queda ahí;
por el contrario marca la tendencia de la vida cotidiana y se extiende a los
medios de comunicación, elecciones, políticas públicas, para manifestaciones
públicas, como canal de libertad de expresión, para la literatura,
investigación, academia, política y así a diversos sectores y espacios. De
manera certera se ha dicho que con Twitter, no hay nada más antiguo que los
periódicos del día siguiente, se ha convertido en uno de los medios informativos
más ágiles. Twitter es una red sencilla (por su composición y naturaleza),
abierta ya que no es necesario estar registrado en este red para leer los
textos de los usuarios, lo que convierte a TW en un difusor de ideas e
informaciones más allá del grupo cercano. Es unidireccional, en virtud de que
no es requisito para los usuarios seguirse mutuamente. Constituye una red que
requiere constancia y creatividad para potencializar sus funcionalidades.
Facebook,
es una red social cotidiana cuyos participantes tienen la opción de escribir en
los muros de otros –a lo cual llamo grafiti virtual- con objetivos variados. A
la par que contiene aplicaciones (juegos varios) para sumergirse en un mundo
irreal, donde incluso los lleva a pedir ayuda y regalos a otros jugadores. Cual
muro que es, Facebook se mueve lento y emula más a un mundo de caramelo, donde
es posible contactarnos con amigos de la infancia y así. De repente esta red
hace presas y cautiva a quien desde mi punto de vista haría un papel destacado
en Twitter. Facebook es una red compleja (por su multiplicidad de aplicaciones)
para gente sencilla. Es bidireccional, ya que requiere consentimiento del otro
para generar amistad.
No
obstante sus marcadas diferencias, ambas redes encuentran un punto de
convergencia: las personas que las habitan y les dan sentido. Pero, no todo
queda en su estructura y composición para facilitar y optimizar su uso para
diversas causas; sino que su naturaleza depende de los caprichos de una
sociedad que les dan forma y hasta las destruye; los ejemplos son varios, las Redes
Sociales cambian, se transforman, se extinguen, se regeneran al paso mismo de
quien las utiliza.
Ahora
pregunto a mis lectores sus puntos de vista y lanzo las siguientes preguntas
iníciales: ¿Las RS son democráticas? ¿Son incluyentes? ¿Son para todos?
¿Constituyen un factor de progreso?
Nota bene:
Aprovecho esta Columna para decir que el 30 de abril de 1993 (justo hace 20 años)
los creadores de la Worl Wide Web
(WWW) o simplemente la Web permitieron su uso de forma libre y gratuita, lo que
ha modificado la manera de comunicarnos, innovar y de vivir. ¡Felices 20 años
de la Web libre, accesible y gratuita!
Por
hoy es todo.
¡Nos
leemos la próxima Nornilandia!