@BarbaraCabrera
“Internet
es el emblema de la cultura digital”
Bart
Kosko
¿Qué se
aproxima? ¿Quién está ahí? ¿Es un superhéroe? ¿Un avión? ¿Acaso una heroína?
¡No! ¡Es una Lady!
Lady es una
voz inglesa, que equivale a la palabra dama. En la antigüedad, era un título
que designaba a las mujeres el status
de noble. Actualmente, se emplea para viralizar cierto tipo de comportamientos,
regularmente como protesta o para exhibir justamente esas maneras, las más de
las veces, inadecuadas.
En este
sentido, y ante la revolución digital en que estamos inmersos, cada día surge
una o más Ladys, aquí algunos ejemplos:
Ø #LadyCombi una
mujer que iba acompañada de su novio en este tipo de transporte, le confiesa a
este que sale con uno de los amigos de él, negando que se trate de una
infidelidad; el público presente da consejos al chico para que deje a su novia.
Ø #LadyR15
usuarios de redes sociales viralizaron la imagen de una trabajadora del
gobierno estatal de Coahuila que posa portando un arma larga.
Ø #LadyCocos en
aparente estado de ebriedad, una mujer muestra sus atributos a los
automovilistas desde el quemacocos del vehículo donde se desplazaba.
Ø #LadyIMSS una
señora exige su medicina gritándole estúpido y demás insultos a quien las entregaba.
Ø Otra #LadyIMSS
una recepcionista de urgencias del IMSS en Pachuca, Hidalgo, le da un trato
poco cordial a una derechohabiente, y la insulta con una seña obscena.
Ø #LadyChiles
intentó denunciar el robo de comida [chiles en nogada] por parte de su empleada
doméstica, ¿el resultado? fue víctima de críticas, insultos y burlas.
Ø #LadyBoletos
se trata de una taquillera del metro nombrada de esta manera por negar el
servicio a un usuario.
Ø #LadyDedo una
mujer en Mérida, Yucatán mete su dedo para “sacar su cambio” de un teléfono
público, quedándosele atorado; fue auxiliada por los bomberos y amenazó con
demandar.
Ø #LadyPanteones siendo
regidora la priísta Elisa Ayón, se dio a conocer una grabación donde insultaba,
reclamaba y extorsionaba a empleados de panteones del Ayuntamiento de
Guadalajara, para recibir sus moches.
Ø #LadyCucaracha
fue nombrada así una mujer que intentó denunciar una cucaracha en su comida en
un restaurante chino ubicado en Morelia, Michoacán. Todo se salió de control
cuando exigió una indemnización de 100 dólares debido a que su esposo era
extranjero.
Ø #LadysPolanco
se trató de un grupo de mujeres en estado de ebriedad que insultan a la
autoridad llamándolos asalariados de mierda.
Ø #LadyProfeco
intenta abusar de la posición de su padre para hacer sancionar a un restaurante
del centro de la Ciudad
de México, donde exigía una mesa en el área de no fumar.
Ø #Lady100pesos
se trata de una mujer en estado de ebriedad que salta a la fama por querer
corromper a las autoridades con un billete de 100 pesos; dicha joven aprovechó
sus 5 minutos de fama, celebrando.
Ø #LadyChicharron
policía municipal de Monterrey muestra sus pechos en Facebook.
Ø #LadyJochos
conductora de TDN en Televisa armó un escándalo en un puesto de Hot Dogs de la Colonia Roma
Ø #LadyPanda se
hizo viral un video donde se ve a José Madero ex vocalista de Panda limpiándose
los besos de sus fans, de ahí este mote.
Ø #LadyCajero
una mujer intentaba sacar dinero de un cajero automático de forma segura, su
acompañante la tapa con un suéter, de ahí surge esta nueva estrella de las
redes sociales.
Ø #LadyMatemáticas fue nombrada así una joven que se convirtió en la primera mexicana en
ganar una medalla de oro en la Olimpiada
Femenil
Ø #LadyBritneySeñal una mujer invade la ciclovía en Guadalajara, Jalisco para ir a comprar
flores “a buen precio” para su mamá, una ciclista le pide quite su auto; la
respuesta fue pintarle dedo.
Ø #LadyCemento a
una aficionada se le ve llorando en un video que dio vuelta a las redes, ante
la derrota del Cruz Azul.
Ø #LadyChivas
una funcionaria de Tlaquepaque, Jalisco, a través de Twitter emitió comentarios
ofensivos contra aficionados del América, Atlas y hasta contra la policía
tapatía; después de ello, tuvo que dar las gracias en su trabajo.
Ø #LadySapito en
referencia al enojo de la cantante de pop Belinda cuando a la cantante le
pidieron cantara “Sapito”.
Ø LadySometidas en redes sociales circuló un video donde
varias mujeres capturan a un elemento de seguridad, para evitar que detenga a
un sujeto, propinándole tremenda golpiza.
Ø #LadyDiscúlpemeLeAviso una joven ocupa un lugar para personas discapacitadas; otra
mujer le bloquea la salida burlándose; la primera, molesta, le exige se mueva.
Ø #LadyTeLaParto
una mujer en Querétaro amenaza a chofer de microbús con el bastón de seguridad
de su vehículo, luego de que éste se mete en su carril.
Ø #LadyVotosOaxaca
en redes sociales es exhibida Eva Diego Cruz, candidata de la Coalición con Rumbo y
Estabilidad por Oaxaca (CREO) por el distrito 16 con sede en Zimatlán de
Álvarez-Ocotlán de Morelos, por acudir a un evento bajo los efectos del alcohol
solicitando el voto de los presentes.
Ø #LadyElotes la
candidata a la alcaldía de Aguascalientes por el PAN, Teresa Jiménez, propone
el consumo de elotes como medida para combatir el suicidio.
Con estos ejemplos, vemos como entre Ladys hay
niveles; dichos personajes van desde la banalidad, hasta las estudiosas,
pasando por los casos de abuso, prepotencia, señalamientos de malas prácticas
electorales y mecanismos de defensa ante el hartazgo de determinadas situaciones;
de ahí que sean utilizadas las redes sociales para denunciar, con meme y
trolleo incluido.
Y aunque su naturaleza primigenia se ha desvirtuado,
ahora se hacen memes a la menor provocación, con su respectiva viralidad acerca
de cualquier acto u omisión; o de determinado hecho que alguien considere digno
de hacer que de vuelta a las redes sociales y convertirlo en Trending Topic; lo anterior lo confirma
la tendencia de hace algunos días cuyo hashtag
fue #NosFaltaUnaLady.
Lo cierto es que aquella época donde hablábamos de
héroes y heroínas tal parece está quedando para el anecdotario; hoy estamos en
una era plagada de Ladys, Lores, trolles y memes; donde unos los crean y otros
los difunden. Las preguntas son ¿resulta
válido hacerlo? ¿Hasta dónde no estamos cruzando esta delgada y casi
imperceptible línea de invasión al derecho a la privacidad? ¿Si no es así de
qué otra manera frenar ciertos abusos? Y conste que este y otros asuntos
van más allá del recurrente síntoma de legislar a la menor provocación para penarlo;
tienen que ver, sobre todo con la alfabetización digital y las reglas de
etiqueta digital, aunado a que estamos viviendo tiempos difíciles donde es
evidente el “mal humor social”. Lo dejo a la reflexión.
Es todo por hoy.
¡Hasta la próxima Nornilandia!