24 abr 2024

VIOLENTA Y VIRULENTA OPOSICIÓN

 

Dra. Bárbara Leonor Cabrera Pantoja | Entre letras, con mi café y a un “x” de distancia me encuentran como @_BarbaraCabrera

 


 

“La política es hacer historia; es transformar y ello implica pugnar siempre por lo que es justo y parece imposible de alcanzar; si no se lucha en forma sostenida por convertir los sueños en realidad, no hay práctica política que valga la pena, ni transformación posible, ni diferencia sustancial entre la vida y la nada”

Así lo dijo el Presidente Andrés Manuel López Obrador

 

En México estamos ante un cambio de régimen con la Cuarta Transformación de la vida pública, hecho tan relevante como las tres primeras transformaciones: la Independencia, la Reforma y la Revolución; las cuales fueron convulsas y violentas, dejando miles de muertos que dieron su vida por dejarnos patria. La que estamos viviendo en este momento se llevó a cabo por la vía pacífica y a partir de una revolución de las conciencias; surgida desde la lucha social y con un Proyecto Alternativo de Nación bien definido, liderado por Andrés Manuel López Obrador, quien es actualmente Presidente de la República.

En suma, como todo cambio de régimen trae consigo nuevos cimientos, considero trascendente enfatizar que la Cuarta Transformación se refiere a una época de la historia contemporánea de México, dicho periodo se acompaña de un nuevo modelo político y de gobierno denominado humanismo mexicano, el cual tiene sustento en los pilares de la transformación que señalaré más adelante y tienen como objetivo alcanzar el Estado de bienestar.

En este orden de ideas, el humanismo mexicano como una nueva forma de gobernar y en consecuencia de hacer política es el ecosistema donde se sustentan los pilares de la transformación, los cuales son doce, a saber: revolución de las conciencias; poder del pueblo; mandar obedeciendo; separar al poder económico del poder político; no mentir, no robar, no traicionar al pueblo; austeridad republicana; no puede haber gobierno rico con pueblo pobre; por el bien de todos, primero los pobres; combate a la corrupción y cero impunidad; economía moral; autoridad moral; y, República amorosa y fraterna.

En efecto, el pueblo soberano de la mano del Presidente Andrés Manuel López Obrador hemos instaurando un nuevo modelo de gobierno, el humanismo mexicano; con un modelo económico novedoso: la economía moral. Situación que ha dado buenos resultados, para muestra baste ver las referencias del CONEVAL y del INEGI, organismos autónomos, que después de llevar a cabo sus respectivos análisis, dan como resultado avances sustanciales en el Estado de bienestar y de combate a pobreza.

Y eso, no le gusta nada, nadita a la oposición mezquina y moralmente derrotada, quien está mostrando su verdadera naturaleza: violenta y virulenta.

Se han pasado tooooodo el sexenio propagando su odio no solo hacia el Presidente López Obrador, sino hacia México. Su desprecio al pueblo es latente y constante.

Celebran –y no dudemos que sean los causantes- el sabotaje al metro y al tren maya, incluido el boicot a los pozos de agua en la ciudad de México; sin olvidar la violencia que van azuzando por el país para dar a entender que todo está mal.  Aplauden el genocidio a Palestina, dando su respaldo a Israel.

No se inmutan ante el violento asalto a la embajada de México en Ecuador; lo que es más, muestran su apoyo a Daniel Noboa, como el caso de la curulera en el Senado Lilly del Carmen Téllez quien ofrece una rueda de prensa para pedir disculpas a Ecuador criticando la conducta del Presidente en relación a la situación diplomática con aquel país, a la que se refirió como un actuar “gansteril” acusando a López Obrador de violar la autonomía, libertad y justicia de Ecuador al dar cobijo a un criminal, haciendo referencia al ex vicepresidente Jorge Glas.


Lo que es un hecho, y de eso dejo constancia en esta Nornilandia es que hasta la Organización de Estados Americanos (OEA) -organismo que tanto idolatra la oposición moralmente derrotada- condenó enérgicamente el asalto de Ecuador a la Embajada mexicana, con 29 votos a favor y el rechazo de Ecuador, la OEA acusó al Gobierno de Daniel Noboa de haber violado la Convención de Viena y la política de asilo.

Además, la canciller Alicia Bárcena informó que el Presidente Andrés Manuel López Obrador recibió un amplio respaldo de la comunidad internacional, con apoyo proveniente de 29 países, 20 de América Latina –entre los que destacan Brasil, Argentina, Colombia, Chile, Venezuela, Perú, Paraguay, Uruguay y Cuba- así como 10 de Europa, además de 8 organismos internacionales.

En fin, el mundo al revés con Lilly Téllez y otros trasnochados ¡vaya traidora a la patria! Ni Augusto Pinochet, ni Videla se atrevieron a tanto. No señora Téllez, lo suyo es vergonzoso y entreguista. Solo usted y su partido, el PAN, defienden la intromisión a la soberanía mexicana por parte de Ecuador. Debería pedir disculpas a los mexicanos, entregar su escaño y seguir su camino.

La violenta y virulenta oposición no titubea en seguir utilizando el viejo manual de la política de pillaje que tanto les apasiona, no dudan en usar cualquier artilugio y maña para intentar tomar por la fuerza lo que no les pertenece.

Los pocos Estados que gobiernan, están bajo el peligro de dinamitar el federalismo, de hecho, quienes hoy son los candidatos del grupo opositor muestran un profundo rechazo a eso que costó décadas de luchas y consolidación, para estar unidos en una federación, para coordinarnos y prosperar: el federalismo.

No tienen proyecto, no tienen ideas; ¡están de-ses-pe-ra-dos!

Hacen uso faccioso del aparato de justicia, por ejemplo, tanto de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como al Poder Judicial en su conjunto, para usar como arma el lawfare. Lo que no ganan en las urnas, lo imponen a fuerza de torcer la ley, con juzgadores que han tomado parte del grupo opositor.

La maquinaria de las instituciones neoliberales al servicio del grupo opositor violento y virulento, hacen lo suyo: intentar frenar la transformación; desde el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, hasta el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, pasando por los resquicios de los “porfiritos” en el Instituto Nacional Electoral, que luego de la salida de Lorenzo Córdova, Ciro Murayama y Edmundo Jacobo, continúan enquistados para ponerse al servicio de los oligarcas y opositores a la Cuarta Transformación.

La violenta y virulenta oposición, que además está moralmente derrotada, tienen bots a sueldo y propagan hashtags nocivos como el de narco presidente y narco candidata, sin tener ningún tipo de prueba.

No caigamos en provocaciones, cuando fuimos oposición nuestra lucha fue pacífica; ellos están aturdidos, no entienden nada.

Al respecto, vale la pena recordar lo publicado por el Presidente Andrés Manuel en su libro ¡Gracias! donde apunta: “Cuando estamos a punto de concluir la primera presidencia del pueblo y por empezar una nueva etapa de la transformación, hagámoslo con el mismo entusiasmo de siempre. Sigamos avivando conciencias adormecidas y organizando a los ciudadanos. Que no nos angustie y detenga el qué dirán nuestros adversarios” (cfr. p. 303)

No se pierda de vista: nosotros, defendemos causas; ellos, defienden intereses.

Mantengamos el apoyo al proceso de transformación que está en marcha y acudamos a las urnas para hacer realidad el Plan C. ¡Ni un paso atrás!

 

Es todo por hoy.

Hasta la próxima Nornilandia.