4 jul 2011

“CRUDA POST-ELECTORAL”


@BarbaraCabrera

“El elector goza del sagrado privilegio de votar por un candidato que eligieron otros”

Ambrose Bierce


Estado de México, Hidalgo, Nayarit y Coahuila; entidades federativas que el día de ayer vivieron la fiesta de la democracia, aquella a la que todos los electores son convocados y realmente pocos son los que acuden a ella; la media nos dice que menos del 50% acudieron a las casillas. Y pregunto en voz alta ¿A que le apuesta el ciudadano común al no salir a elegir a sus gobernantes?

El texto constitucional consolida el acto de votar en las elecciones populares, como una prerrogativa y correlativamente nos refiere que ese mismo evento es una obligación del ciudadano de la república; no obstante si se omite acudir a las urnas no existe sanción alguna.

Otro dato interesante, el voto en el país es: universal, libre, secreto y directo. Cuatro palabras y una sola acción. ¿Les parece mis lectores que esas características se cumplen a cabalidad en cada rincón de México lindo y Herido?

La participación de la sociedad al momento de elegir a sus representantes es fundamental, pues nada menos se elige a quienes deberán cuidar nuestros intereses y serán los que tomen las decisiones a nombre del conglomerado social. Si señores, ellos serán los que diseñen las políticas públicas imperantes, los impuestos que hay que pagar; las obras que hay que ejecutar; en el caso de los legisladores, las leyes que regularán a la población. Y aunque escuchen en ocasiones a la ciudadanía organizada, son los que hasta esta época tienen la palabra decisiva.

Es un hecho, desde que nacemos, estamos destinados a participar; porque incluso los que se abstienen, forman parte de un sector que decidió quedarse pasivo y con ello constituye parte de una posición política; no obstante dejar de votar en el sistema mexicano no ayuda más que a dar el triunfo al que mayor número de sufragios obtiene. ¡No perdamos de vista esta situación!

En palabras de Hermann Heller, la participación debe ser entendida como una relación “operante y operada”, entre la sociedad y el gobierno: entre los individuos de cada nación y las instituciones que le dan forma al Estado. Porque “No podemos conocer una realidad social si no participamos, a la vez en su formación”.

No cabe duda, tal parece que con la cruda post-electoral vivida en la jornada del día de ayer, la cual no culmina hasta conocer formalmente a los ganadores; vamos prestos hacia 2012 cuando tendremos la oportunidad de elegir a quien sucederá al actual habitante de los pinos (a mis lectores de otros países les digo que me refiero al Presidente de la República) un año que estoy segura marcará el rumbo del país en varios sentidos, así que no perdamos la oportunidad que se nos ofrece. (Véase MMXII: ¿AÑO COYUNTURAL? http://bit.ly/ecPpQD)

Al terminar de redactar esta Nornilandia, escucho a los candidatos celebrando su triunfo virtual, aquellos que seguramente serán validados por las instituciones, y que ya fueron ungidos por algunos medios masivos de comunicación. Me da la sensación de que en lugar de avanzar regresamos a los viejos tiempos de un partido político que se vende a los electores cautivos como “el nuevo PRI”, mantra que tendrán que repetirse una y otra vez para poder creérselo. Retrocedemos a los tiempos donde los partidos de oposición son apabullados por una elección que da la impresión que es de Estado.

Y en el recuento de los votos hablaremos de un solo ganador; los demás no importan, con el porcentaje obtenido pasarán a la historia como candidatos derrotados. ¿Sera acaso que después de la cruda post-electoral los ciudadanos ganemos algo?



Espero sus valiosos comentarios.


¡Nos leemos la próxima Nornilandia!